En qué invertir cuando se trata de tu vestido de novia?

Esta es una pregunta muy abierta porque en realidad siempre dependerá de tu propio estilo y objetivo que quieras lograr con tu vestido, pero en general, aquí te presentamos algunos tips.

Si tu estilo es minimal, eres muy sencilla, pero aún así buscas elegancia, entonces seguramente estés por un vestido con cero bordados, pero para lucir más enfócate en que la tela del vestido sea de alta calidad. No tiene que ser de seda, inclusive hay algunas telas sintéticas de aún mejor calidad por su resistencia o la innovación en la mezcla de los tejidos. Puedes identificarlas si al apretarlas, difícilmente se arrugan, su textura al tacto suele ser suave, si son satinadas, el brillo es delicado.

Puede haber telas igualmente muy sencillas y de bajo presupuesto, estas pueden lucir si escoges cortes simples, holgados y con caída. En este caso invierte en accesorios que levanten tu look, joyería y zapatos finos. 

En caso de que lo que busques sea un look espectacular y fastuoso, las telas base pueden ser más sencillas, así como los volúmenes interiores si los llevas. Seguramente habrá presencia de bordados, si el bordado es fino, ya estás del otro lado. Los tules de base de estos bordados de buena calidad suelen ser suaves, la pedrería es delicada aún en abundancia. Igualmente los encajes de mejor calidad son los llamados chantilly o españoles en el mercado mexicano. (encaje y bordado es diferente)

Si eres muy moderna y lo que buscas es verte diferente,  invierte en detalles originales como cortes inesperados, diseños fuera de lo común, inclusive accesorios de autor. Ve en definitiva por modelos de diseño exclusivo o personalizados. 

En todos los casos, si el presupuesto lo da, no está de más invertir en piezas transformables o segundos looks, no sólo por crear un elemento sorpresa sino para estar más cómoda en cierto momento de la fiesta.

En todos los casos siempre es importante contar con un buen maquillaje y peinado, aún si buscas un look natural. Recuerda que tú le das vida al vestido y el mejor accesorio siempre será tu sonrisa y tu actitud, así que sea lo que sea que elijas, que sea tu decisión, que te de comodidad; no sólo física, sino emocional y mental. 

No te disfraces, el vestido debe expresar lo que eres; y sí, también se vale que muestre lo que quieres ser y que trabajas para serlo. Sólo tú sabes lo que mereces y lo que es congruente con tu finanzas y tus prioridades; escúchate.